“Señor, digno eres de recibir la gloria y la honra y el poder; porque tú creaste todas las cosas, y por tu voluntad existen y fueron creadas.” Ap. 4:11
Somos servidores de Dios y de su iglesia y, por su gracia y su voluntad, nos presentamos delante de Dios con toda reverencia, conscientes del privilegio y de la responsabilidad que significa estar delante de su pueblo y de la presencia de nuestro Señor, en medio de la adoración y la alabanza durante cada servicio en nuestra congregación. Estamos también confiados de que no es en nuestras fuerzas, sino a través del único Camino al Padre, el cual es nuestro Señor y Salvador -guiados por su Santo Espíritu como dice Su palabra- que podemos dar gloria y alabanza a su nombre y servir de bendición a la iglesia local, la cual es parte del gran cuerpo de Cristo nuestro Dios, cumpliendo así la primera parte del lema de nuestra congregación: ¡Entramos para adorar!.
En el Ministerio de Adoración y Alabanza IBN damos nuestro mayor esfuerzo a través de cada ensayo y estudio personal, aplicándolo también en el estudio grupal tanto musical como de la Palabra pues Dios es digno de recibir lo mejor de nosotros y porque no ofreceremos a nuestro Dios un “sacrificio” que no nos cueste nada (1-Cro.21:24).
En el Ministerio de Adoración y Alabanza IBN testificamos y exaltamos a Dios a través de la alabanza dando a conocer los hechos maravillosos y prodigiosos de Dios (Sal.105).
En el Ministerio de Alabanza y Adoración servimos con amor al pueblo de Dios para que el Señor traiga su presencia a la congregación y que por medio de los cantos, Dios derrame su poder sanador y milagroso para gloria y alabanza de su Nombre y para bendición de su pueblo.
“Al que está sentado en el trono, y al Cordero, sea la alabanza, la honra, la gloria y el poder, por los siglos de los siglos.” Ap. 5:13b
En el Ministerio de Adoración y Alabanza IBN, damos nuestro mayor esfuerzo en el estudio musical y bíblico para exaltar la grandeza de Dios, su poder, su amor, su misericordia, su justicia y su gracia a través de la correcta ejecución del canto e instrumentos porque Él es digno, y también para servir con amor y celo al pueblo de Dios.
Conformar, instruir y consolidar, de manera saludable y estable, cada equipo de adoración y alabanza. Manejar una estructura de las canciones a través de los charts y crecer integralmente en cuatro áreas: espiritual, musical, fraternal y de proyección social.
